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| Graves problemas de salud a dejado la minería del carbón |
En la prensa del pasado domingo publicaron “Los pueblos que se tragó el carbón”. Para mí fue doloroso, me lleno de sentimientos fuertes y de tristeza, no sólo hacia los habitantes de las poblaciones de Boquerón, El Hatillo y La Loma ubicados en el centro de la reconocida zona carbonera de La Jagua de Ibirico en el departamento del Cesar, sino también hacia todo el sector minero del país.
Me duele el país, me duele la Tierra me duele lo que hacen con el
campesino y me duele que los gobiernos que pasan no hacen nada al respecto. Todos
han sido gobiernos permisivos con la minería o que me diga alguien que
estoy errada.
El campesino resulta engañado a costa del interés que traen las
multinacionales de ofrecer trabajo, mejorar las condiciones de vida, pero la
única realidad es que el campesino va a contribuir engrosar más el bolsillo de
otros, y para ellos problemas de salud muy lamentables, más el reasentamiento que en realidad nunca se da, y la mayoría se quedan en la pura miseria. Que,
como diríamos aquí, quedan con una mano adelante y otra atrás.
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| Contaminación de las agua y daño al medio ambiente |
El resultado es palpable hoy, cuando más de 2000 habitantes se vieron obligados
a dejar sus tierras y su pueblo a la minería del carbón, sin tener otro lugar
donde vivir; simplemente convirtiéndose en desplazados.
Esta es la manera como las multinacionales y los gobiernos que hasta
hoy han estado contribuyendo a que el país en estos momentos cuente con el “mayor
número de desplazados internos en el mundo”. Según el diario El
Colombiano para el año 2012 la cifra de desplazados es alarmante en la
actualidad, pues llega a 28,8 millones de personas (por conflicto armado,
violencia y abusos de los derechos humanos).
Me pregunto si dentro del “plan de restitución de tierras” que
tiene el actual gobierno ¿tiene incluidos todos aquellos afectados por el tema
minero? Si es así, este va a ser un tema de nunca acabar. Ya que según “El Tiempo”
en Colombia no existe ninguna legislación que cobije el manejo adecuado de
desechos producidos por la minería conocida como pasivos ambientales, de tal manera que el desplazamiento continuará pues los desechos y la contaminación ambiental será igual o peor.
Para concluir, el panorama para la minería en el país es en realidad desalentador, pues no hay leyes que protejan el medio ambiente, y de haberlas no las respetan se las pasan por "la faja" y creo que eso no es secreto para nadie. En la minería del carbón resulta mucho más desalentador ya que los desechos están acabando con los pueblos, la vida del minero y el ecosistema en general.
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