martes, 30 de abril de 2013

¿Qué tanto estamos preparados para los desapegos?


Preciosa imagen Blanco & Negro sin autor

He deseado comentar sobre el tema del “desapego” porqué considero que esta palabra conformada de ocho caracteres tiene mucho de forma como de fondo. ¿Qué es el desapego? Es desprendernos de algo, pero si vamos más a fondo es un sentimiento que debemos aprender a desarrollar para no pasarla mal cuando no está en nuestras manos controlar lo que esté sucediendo. Es aprender a ser libres, dejar partir lo que sea que haya pretendido llegar sin lamentos. Es mantener tranquilidad plena.  

El desapego, debemos mirarlo también como un tema cultural, y creo que si no se maneja desde ese enfoque resulta complejo practicarlo; pero no imposible. ¿Por qué lo digo? Parto de un programa en Discovery, que trataba el tema del “alquiler de vientres” tan normal y frecuente que se presenta en la India.

Meses atrás cuando escuche sobre el alquiler de vientres, me pareció escandaloso, ya que no concebía la idea de tener un hijo para entregarlo a otros. Pero Discovery me permitió comprender mejor (sin estar de acuerdo) el caso. Para no entrar en detalles, el programa contaba con el apoyo de un psicólogo, que permitía mostrar la otra cara, y así comprender como se da tan sencillo este tema para las mujeres hindúes. 

Todo se resume al tema del “desprendimiento”, así mismo lo menciono el psicólogo. La mujer hindú que se presta para estas prácticas, regularmente es una mujer de recursos escasos recursos, y con una cantidad absurda y asombrosa de hijos. Son mujeres jóvenes con un estado de salud aceptable, “dentro de las circunstancias que su situación económico-social le permite tener”. Solo piensan en el firme deseo que poder avanzar y “contribuir” dentro de una sociedad machista a las mejoras de la familia. Esta parte si suena extraña, pero así mismo lo dejaron ver.

Cuando aceptan aplicar para el alquiler de vientres, firman documentos legales donde están de acuerdo y se comprometen firmemente a que una vez él bebe nazca no existirá ningún tipo de vínculo afectivo y maternal o derecho sobre el recién nacido. Miran este proceso cómo una negociación y se desprenden por completo de los sentimientos.

En la India, la cultura enseña a alejarse de los sentimientos. En occidente nuestra cultura no la domina. En occidente el tema del afecto, las emociones y apegos son lo que más se cultivan regularmente. Aquí si una persona no gana un trabajo para el cual aplico, se da golpes de pecho (por decirlo de alguna forma) por el suceso. Ya que el apego lleva a la persona a sentirse decepcionada, a sentir celos, envidia, ira; todo depende según sea la circunstancia. Es un tema para mi gusto es profundo e interesante para debatirlo.

Dejando la India atrás y regresando a occidente me pregunto si culturalmente estamos en realidad preparados para poner en práctica los desprendimientos o desapegos. Yo pensaría que no, no hay cultura para esa práctica. Estamos apegados a lo material, pues con frecuencia observamos situaciones donde la pareja se siente que no es nadie si no está con su pareja cuando se rompe la relación, precisamente por los apegos. No están preparados para sobreponerse de las dificultades, las perdidas, a las quiebras empresariales o a ese único objetivo que tenía en mente. Un amigo, califica este tema de los desapegos como “el difícil arte del desprendimiento”.

Pienso que sí es todo un arte, pues hay que aprender a practicarlo. Si queremos avanzar sobre este tema siempre hay que tener presente que lo malo enseña y lo bueno da placer. Si pretendemos dar un cambio notable a la vida y evolucionar "espiritualmente" deberíamos comprender que: “La esencia del camino es el desapego.”   Bodhidharma

¿Estamos preparados para el desapego?

2 comentarios:

  1. Un arte

    El arte de perder se domina fácilmente;
    tantas cosas parecen decididas a extraviarse
    que su pérdida no es ningún desastre.

    Pierde algo cada día. Acepta la angustia
    de las llaves perdidas, de las horas derrochadas en vano.
    El arte de perder se domina fácilmente.

    Después entrénate en perder más lejos, en perder más rápido:
    lugares y nombres, los sitios a los que pensabas viajar.
    Ninguna de esas pérdidas ocasionará el desastre.

    Perdí el reloj de mi madre. Y mira, se me fue
    la última o la penúltima de mis tres casas amadas.
    El arte de perder se domina fácilmente.

    Perdí dos ciudades, dos hermosas ciudades. Y aun más:
    algunos reinos que tenía, dos ríos, un continente.
    Los extraño, pero no fue un desastre.

    Incluso al perderte (la voz bromista, el gesto
    que amo) no habré mentido. Es indudable
    que el arte de perder se domina fácilmente,
    así parezca (¡escríbelo!) un desastre.
    -Elizabeth Bishop-

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  2. Niloba,

    Es un poema que invita a pensar y reflexionar. Dice que el arte de perder se domina fácilmente. Yo pienso todo lo contrario. Es difícil aceptar las perdidas, pero es algo en lo que hay que aprender a dominar.

    Tal como menciona Elizabeth Bishop hay que comenzar por “pequeñeces”, así se va ganando coraje y fortaleza.

    Gracias por tu valioso aporte.

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